La ciudad cabecera del norte santafesino fue testigo de una jornada de lluvia contundente. La escenografía mostraba gran cantidad de arboles caídos, cables de luz desplegados por las calles y muchos daños que tardarán en solucionarse.
Desde el municipio local pidieron a la población no salir de sus hogares. Las distintas secretarias han trabajado a destajo en las zonas afectadas por un temporal que golpeó fuerte y dejó decenas de calles anegadas por ramas y árboles que cubren completamente el ancho de la calzada.
A su vez, el ejecutivo local, informó que el servicio de recolección de residuos no iba a funcionar en la noche de este domingo 29 de noviembre, por encontrarse todas las cuadrillas de las distintas áreas municipales trabajando en los sectores más afectados por las fuertes precipitaciones y ráfagas de viento, con acciones de limpieza general, desobstrucción de desagües y remoción de ramas y árboles caídos.
En la continuidad del monitoreo permanente de la situación y la aplicación de los protocolos existentes, es necesario destacar la respuesta positiva de los sistemas de evacuación pluvial, que permiten que los excedentes hídricos escurran con fluidez.
Por otro lado, la Empresa Provincial de la Energía, informaron que las prioridades son el agua potable y los centros de salud públicos y privados, el resto tendrán que esperar a que se pueda trabajar.