En contacto con Carlos Baragiola en FM Nativa, después de un día convulsionado por la firma del decreto de emergencia económica, el Secretario Romero Mansur brindó detalles del mismo:
“Queremos transmitir tranquilidad porque hay mucha desinformación. El decreto de emergencia económica es abrir un paraguas, no significa que el municipio está prendido fuego ni en sensación de paros, nada que ver. Es una medida que viene acompañada a tantas otras que venimos haciendo que buscar mejorar la evolución de los gastos”, sostuvo.
Romero Mansur explicó que “hay una realidad que no es ajena a ningún municipio del país y a ninguna familia. Estamos en una crisis financiera donde las familias también tuvieron que empezar a ajustarse y a ver cuáles son las prioridades, y el municipio no es ajeno a esta realidad”
“Es la tercera emergencia económica que se declara en nuestra gestión, es un formato legal que corresponde. Este año este decreto viene con una muestra muy importante que es el congelamiento del sueldo del Intendente y de los funcionarios del ejecutivo. Este congelamiento no abarca a los concejales porque el Intendente no tiene la potestad de hacerlo, pero sí le hicimos el pedido para que se sumen a esta medida”.
Asimismo el Secretario dejó claro que “no es un medida que va a salvar la economía del municipio, sino que es un gesto para mostrar que las soluciones las empezamos por casa. Si recortamos las horas extras a los empleados municipales también nosotros tenemos que mostrar nuestro esfuerzo. El decreto sostiene a esta emergencia hasta la final de las actividades en este 2019”
Tras las críticas de la oposición por la baja de la TGI y demás, respondió: “La baja de los impuestos no fue el motivo de esto. El municipio tiene cuatro grandes ingresos, de los cuales dos representan casi el 60% que son la coparticipación nacional y la coparticipación provincial. Después están los dos recursos propios que son el derecho de registro de inspección y la tasa general de inmuebles.La coparticipación nacional y provincial, que representa el 60% de los ingresos municipales, se ha visto detraído en un 30%, y esto es producto de la crisis económica”.
“Si bien los refuerzos de los recursos propios que hemos hecho, sobre todo la rebaja de TGI y de derecho de registro de inspección, han permitido evolucionar favorablemente esas variables recaudando más del 25% que el año pasado, pero pudiendo hacer poco contra el 56% que tenemos de inflación”
“Hay algo más preocupante. Los recursos propios bajaron en comparación a la inflación, ahora los gastos subieron más que la inflación. Hay tres grandes centros de costos que tiene el municipio: recursos humanos, que corresponde al 65% del gasto total que evoluciona igual que la inflación; el otro grande centro de costos es el consumo, sobre todo combustible que también aumentó; y el tercer centro de costos es alimento. Cuando ingresamos a la gestión se preparaban 700 raciones diarias de comida para comedores comunitarios, y hoy estamos arriba de 2200 y el aporte que recibimos solo sirve para solventar el 40% de los gastos de alimentos y en eso no vamos a recortar”, concluyó.